La mejor herencia que podemos dejarle a nuestros hijos es amor, conocimiento y un planeta en el que puedan vivir.
Fotografía de: Esther Vallado
¿Has pensado alguna vez que el agua fría, limpia y transparente que sale de tu grifo pudo haber sido puritficada para tí por un humedal o quizás por el sistema radical de un enorme bosque?
Demasiado a menudo damos por hecho la disponibilidad de productos y bienes. Si seguimos la cadena de producción de muchos productos hasta su fuente, la mayor parte de las veces terminamos hablando de biodiversidad.
La pérdida continua de biodiversidad resultará en una disminución rápida de la riqueza natural de La Tierra y una reducción dramática de los servicios ecosistémicos futuros. La producción agrícola decrecerá de forma alarmante si desaparecen los hongos y bacterias que convierten los suelos en fértiles y descomponen los deshechos. Lo mismo ocurrirá si los insectos, murciélagos y pájaros – que polinizan las flores – reducen su número. Con un 42% de los tratamientos contra el cáncer procedentes de fuentes naturales, la pérdida de biodiversidad nos obligará a afrontar retos sin precedentes.
Estamos perdiendo la belleza y riqueza de nuestro ambiente natural, y desestabilizando los mismos procesos ecológicos de los cuales dependemos. La vida en La Tierra no puede existir sin biodiversidad.
¿Qué vas a hacer hoy para cuidar tu/nuestro planeta?
(Texto extraido y traducido parcialmente de: http://www.countdown2010.net/biodiversity)
Asociación Biodiversa 